De las relaciones humanas y otras pesadillas (2012)

Todos, y no es cosa extraña o de desconocimiento que los seres humanos se relacionen los unos con los otros, entendiendo la lógica animal que tenemos impregnada y afortunadamente la mantenemos; que somos seres por naturaleza sociables, lo que es análogo a andar en manada. Muchos quisiéramos mandar las cosas para el noveno circulo del infierno pero en realidad no podemos. La situación se complica cuando en ella las mieles del amor, que en otros círculos naturales llamaríamos normalmente instinto, hacen que el ser humano entre en la necesidad de llevar a cabo actos llenos de estupidez y con austera participación de la idiotez que en los tiempos de hoy, muy bien nos caracteriza.

Las mareas del amor no se ven alteradas o modificadas hasta que las queridas hormonas hacen de las suyas y pensamos mas en banalidades carnales, que en bellas situaciones llenas de la poca relación humana que hay hoy en día. En nuestras mentes comenzaran a llegar recuerdos, de amigos y amigas de nuestra pre-adolescencia, que luego fueron parte de nuestro desarrollo como seres, llegando meramente a lo que venimos siendo hoy en día. Obviamente estarán ligados nuestros primeros amores, los vínculos con personas las cuales siguen activos, la primera vez que tuvimos sexo, y diferentes situaciones que ya en lo particular cada cual tendrá el gusto de refrescar su memoria y reír o llorar por ello. 

Haciendo capitulaciones de encuentros pasados, que dejaron gratos recuerdos y movidas sentimentales de grueso calibre, me llegan a mi memoria bellos recuerdos: besos interminables, risas incontrolables, sentimientos encontrados, gritos desesperados, lagrimas de amor y desilusión; y un sin fin de buenos y memorables recuerdos que participes pudieron ya olvidar, pero en mi mente siguen tan presentes como el día que ocurrieron. Muchas veces tengo la voz de mi abuelita en mi oreja recordándome lo bello que fueron esos momentos memorables y a la vez desdichados de mi historia personal, pero que hoy son la raíz y motivo de estas lineas. 

Las gentes que han tratado de convivir conmigo en mi ultima década de experiencia, saben de las buenas y malas situaciones que he vivido, que me han forjado como persona y que lo siguen haciendo mientras que el grandioso sol sale por el oriente con las buenas nuevas de los amaneceres sabaneros. Al igual que esa sumatoria de apuntes y recuentos que el sol de los venados de estos días me ha de recordar. Nunca en la vida he hablado de esto con otras personas pero si mi vida pudiera resumirse en algún tema, este no seria precisamente las relaciones humanas; soy un completo inútil cuando de eso trata!

No soy capas de hablarle a una niña y manifestarle la atracción que ella genera en mi; no soy lo suficientemente persona para decirle a mi par que podemos hacer cosas varias obteniendo resultados abrumadores; no soy a la vez persona para adelantarme a los malos ratos de las gentes, y que se que pueden suceder; no soy lo suficientemente humano para tener relaciones humanas. No lo niego, siempre quise hablar, sonreír, compartir, querer, soñar, y felizmente vivir; pero lastimosamente mi carencia de humanismo me ha llevado a ser un ermitaño mas que solo esta sentado frente a un mundo que nunca he explorado ni nunca he tratado de activar, por el simple miedo a hacer otras cosas que no he hecho.

Dentro de mi larga lista de deseos en primer punto es poder confesarle a una mujer lo que siento al verla sonreír; confesarle a un niño lo feliz que me hace verlo jugar; quisiera el día de mañana poder escuchar y aprender de todos los abuelitos que veo por donde voy; quisiera un día de estos poder encontrar la mujer que me cautive con su ser y que me haga desbordar de alegría por su resplandor. Me alegaba a mi ser el poder llegar a cumplir mis ideales, por que dentro de mi sabia que esto no va a suceder dentro de poco tiempo. Mis relaciones de mutualismo con los demás seres se han desviado a puntos meramente banales, que carecen de la lógica del amor, del calor del corazón.

Cada día que pasa ese sumario de oportunidades y buenas razones que creo construir se convierte en una lista de promesas por cumplir, de acciones por realizar. Todo ese compendio de deseos sin cumplir, de anhelos inexplicables; se convierten en una lista negra de sombras y malos augurios que mi ser tal vez comience ya a repudiar, por el simple hecho de no arriesgarme.

El día de hoy no es mas que los deseos de un hombre que añora calor y felicidad, junto a una mujer; pero se convierten en pesadillas sin fin a la hora de soñar y lógicamente de dormir. El amor que soñé; la felicidad que pedí; la alegría que desborde. No vienen siendo mas que las pesadillas que hoy construí, por las relaciones humanas que no viví!