BRECHAS SOCIALES, ¿CAUSA O FRUTO? (2012)

Si bien la historia de Colombia ha estado llena de mártires que por enaltecer las banderas de lucha en harás de la justicia social y la reparación a los damnificados, sacrificaron su vida para dicho fin con resultados catastróficos para sus vidas y los suyos. Muchos de ellos tal vez no se decidieron por las vías regulares y legales que presentaba la organización del estado para esos días, casi nulas o inexistentes; y recurrieron a las armas en muchos casos, también con cierto curiosidad que generaban los cambios del mundo en dichos momentos donde jóvenes de familias prestantes decidieron luchar para que la brecha entre los ricos y pobres fuera mínima y así poder tener una sociedad mas equilibrada y justa. Pero de todas esas muestras de la historia nos queda una pregunta: ¿Qué marco legal esta obviando el estado para que en su construcción de sociedad no se planteara la eliminación de esas brechas y los muchachos se fueran para “el monte”?

Cuando se hace visible y viable el poder entablar la creación de una Asamblea Nacional Constituyente, gracias a que se estaba llegando al borde en donde toda la vulnerabilidad del ciudadano no estaba contemplada en ningún documento y se tenia que hacer salvedad precisa, de que se necesitaba para vivir; se crea el momento preciso para dejar en claro que esta seria la herramienta fundamental para que la brecha social se disminuyera. Si bien es cierto que muchos de los colombianos que sentamos una postura critica frente a las actitudes que nosotros mismos conllevamos y dejamos pasar, no hemos nunca dejado en claro que lo que las leyes y la buena fe de los políticos pretende, no es abolir esa brecha; que quizás sea la excusa perfecta para ser elegidos o pretender figurar, bueno eso es otra cosa. Pero no será la motivación que al colombiano del común le cierne por simplemente servir a la patria.

En un momento álgido de la discusión política de este país es común oír que hablan de los menos favorecidos y la población vulnerable, tal como si fuera su campaña publicitaria y no un problema a solventar en si. Pero la discusión se torna complicada cuando al estar activo nuestro perfil político hacemos ver que esta brecha social no esta determinada en si por factores legislativos propiamente, ni tampoco por factores internacionales como muchos no lo hacen creer. La brecha en Colombia se hace visible por que aquí la queremos hacer visible y nos interesa que sea visible y que este presente en cada uno de los caldos de promesas que dejan ver políticos deshonestos que solo  han buscado perjudicar los intereses de las clases que ellos representan. La brecha en Colombia hasta hace 25 o 20 años era visible y notoria plenamente en las ciudades tanto como uno pudiera imaginarse, por motivos geográficos y de cierta manera sociales en el campo era mas compleja la situación, cosa que no varia con respecto a hoy en día; y que por diversos motivos no se trataba a tiempo y con la mayor agilidad posible. Todavía para los citadinos nos es difícil entender como a calles de diferencia se ven lujos apartamentos y en otras direcciones se ven casas de cartón con techos de zinc. Podría asegurar que si los habitantes de las casas de cartón conocieran el marco constitucional podrían tener claro lo que sus derechos y garantías les favorecen, y contribuir así a la reducción de la brecha existente. Caso similar sucede en el campo, donde para nosotros los citadinos no es fácil verlo y entenderlo, fincas de miles de hectáreas productoras de diversos cultivos, campos de pastoreo y belleza natural por doquier; rodeadas por parcelas de campesinos azotados por grupos al margen de la ley. Si los campesinos hicieran valer sus derechos seguramente tuvieran una finca con belleza natural por doquier.

Como lo narraba anteriormente, la creación y validación de la constitución del 91 ante la sociedad prestante genero cambios, para bien y de gran interés, pero los excluidos tenían la vida igual. Por mas que quisiéramos que se hicieran valer lo contemplado en la carta magna, era muy complejo el exigir a la clase política total cumplimento, y a la población que se apropiara de la construcción constitucional de mayor vigor en el mundo actual. En algunos momentos es tal la falta de interés de la población colombiana que la constitución y el pueblo colombiano, son análogos como si un bebe tuviera una calculadora en sus manos, en donde tiene la posibilidad de sacar fruto de dicho elemento pero su desarrollo cognitivo no lo permite.

Es fácil atacar y ser ofensivo frente a políticas que la sociedad actual hemos dejado pasar sin poner peros algunos, y que muy pocos han dejado entrever para poder comenzar a actuar como deberíamos. Las herramientas ya están, son muy buenas, nos permiten hacer cosas que antes no podíamos y ahora están contempladas por nuestro marco constitucional, el simple hecho de poder hacer una petición formal exigiendo el cumplimento de algún derecho es una avance de grandes niveles. Las garantías que nos ofrece el estado por el simple hecho de ser parte de él, nos asegura que a nivel jurídico podemos exigir lo que nos corresponde y hacer valer nuestro contrato vinculante con el estado. Las opciones que tenemos como participes de este estado son varias y son de gran valor al ciudadano por que con ellas se van a ver protegidos y cobijados con una política de apoyo y acompañamiento seguro.

En Colombia la brecha sigue siendo amplia y cada día que sigamos obviando y desconociendo las diferentes posibilidades de ser participes del estado, contribuirá para que la brecha crezca. Nuestros deberes como ciudadanos están ligados a la cooperación entre nosotros para hacer valer nuestros derechos y respetarnos entre nosotros los nuestros, al igual que colaborar y contribuir a los organismos estatales para el pleno funcionamiento y contribución a la sociedad.

La historia nos demuestra una vez más que vamos desarrollando herramientas validas para una construcción de estado y sociedad mayor a la que tenemos. La brecha es grande no podemos negarlo, pero en nuestras manos esta todo para que sigamos acortando esa distancia en donde todos seremos ser beneficiados, esas brechas sociales serán siempre la causa para que nosotros sigamos construyendo una sociedad mas equitativa y de mayor nivel cultural, cívico, social. Y también será le fruto de haber hecho algo mal y no saber remediarlo, sin saber utilizar las herramientas que nosotros mismos construimos. Cuando seamos profesionales, estaremos aportando un poco mas a cerrar la brecha y así de a pequeños pasos con grandes saberes, propósitos y anhelos; seguiremos construyendo la Colombia que cada uno queremos.

BIBLIOGRAFIA

·         Constitución Política de Colombia, Edición 2006

·         Bejarano, Ana María. La constitución de 1991: Un proyecto de construcción institucional.